sábado, 29 de marzo de 2014

Simón García 75 años en la escena.







Simón García 75 años en la escena.
Hace algún tiempo tuve la oportunidad de conocer a un hombre que de sólo mirarlo inspiraba afecto y bondad. Yo sabía de él por haberlo visto con diversos personajes en la televisión nacional. Pero hasta ese día no tenía la fortuna de haber cruzado palabra alguna con él.
Para ese entonces yo conducía un programa infantil en una televisora regional,  en ella yo caracterizaba un abuelo el cual siempre estaba rodeado de niños y presentaba diversos actores locales y de vez en cuando alguna figura nacional.  La primera vez que vi en persona a este hombre de más o menos 1.80 de estatura fue a causa de una invitación que le hiciera la productora de mi programa. Cuando entro al set de grabación fue de lo más gracioso, llego vestido como uno de los personajes que él había popularizado en la televisión nacional al lado de uno de los grandes comediantes latinoamericanos como lo es Carlos Villagrán (KIKO), llego vestido como PICHICHO. Pichicho, el personaje era un niño  con algunas pecas y un pantalón de mangas cortas y tirantes para sostenerlos, telas de full color y una gran personalidad de niño extrovertido.  Al entrar al set casi grito  _Abuelo_ y de inmediato dio a mi personaje un trato único de respeto tanto en lo personal como en lo profesional. Al terminar el programa y despedir a los niños, caminamos juntos por los pasillos del canal rumbo al camerino, conversando como un abuelo hablaría en el parque junto a su nieto Pichicho. Ya en la soledad del camerino compartido nos despojamos de los personajes y fue entonces cuando por primera vez pude hablar con el actor SIMÓN GARCÍA. Fue impresionante ver una figura de la comedia nacional, un artista de su talla que había trabajado en dramáticos de importancia, en series que habían marcado época estuviera allí de tu a tu.  No podía creer que él,   un actor que había recorrido mundo y era referencia obligada de espacios infantiles transmitidos dentro y fuera del país fuese tan humano y sencillo que no dejaba de alabar mi trabajo. Tal fue la impresión  que me causo con sus comentarios y con su sencillez que no pude corresponder los halagos que me propinaba con algo similar. Era casi imposible imaginar que una figura de su talla fuese tan humilde de alma y corazón. ¿Dónde estaba el engreimiento que uno le atribuye o imagina que tiene todo aquel que está en la televisión nacional? Allí no estaba, por lo menos no en aquel Simón que conocí en el canal, y que se convirtió desde entonces en un gran amigo.
Después de ese día, han sido muchos los encuentros con Simón y muchas las conversaciones telefónicas entre Pichicho y El Abuelo. Porque nos hemos acostumbrado cuando nos llamamos que son ellos (los personajes)  los primeros que se hablan, se ríen, se vacilan y se meten con nosotros (sus intérpretes),  hasta que al fin se cansan y nos dan paso a nosotros (los actores) para enterarnos de cómo nos va a cada uno.
Este recuento puede ser innecesario, pero recordarlo me alegra tanto la vida que no quise obviarlo porque sé que tu Simón también repasaras los detalles del relato y disfrutaras de esta amistad que juntos hemos construido. Hermano, el tiempo me ha permitido recibir de ti afecto, cariño, hermandad y sabios consejos. Porque hablar contigo siempre es un aprendizaje uno de esos que se atesoran y te ratifican que si existen seres humanos dispuestos a dar como tú lo haces.
 Hoy cumples 75  años y sería fácil decirlo si se tratara de una persona común, pero tú Simón, tú eres realmente especial y nada común, tú que a lo largo de tu historia eres   grande entre los grandes, tú que sin egoísmo das tus conocimientos, que estas constantemente buscando la forma de ayudar a todo el que te rodea, y que de paso elegiste una carrera tan noble como la actuación, una profesión inventada para dar felicidad a todo el que nos mira actuar.  En ti 75 años no es  juego, porque a pesar de la alegría de tu alma has sido un hombre de retos y responsable con tu vida y con la vida que has sembrado en esta tierra como el hecho de haber sabido ser un gran padre para tus hijos y para aquellos que sin ser tuyos biológicamente te sentimos nuestro padre.
Hoy cumples años y entonces a mi me da por homenajearte con estas líneas, pero debo aclarar que este no es un simple homenaje, esta es una declaración pública de GRACIAS. Si hermano querido,  GRACIAS por la riqueza de tu cariño, por las largas conversaciones, por el abrazo fuerte y oportuno, por mostrarme  que si existe gente buena en el mundo. Por aceptar hace ya varios años una invitación para estar en un programa de provincia junto a un viejito siendo tú la figura que ya eras a nivel nacional, porque gracias a ese gesto humilde de ir al programa te descubrí amigo.  Y sobre todo mi hermano,  GRACIAS POR FORTUNA DE SER FAMILIA. GRACIAS MIL.
FELIZ CUMPLEAÑOS PICHICHO.
FELIZ CUMPEAÑOS SIMÖN.
FELIZ CUMPLEAÑOS HERMANO DEL ALMA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario